Los abuelos dejan huella

 Murió el tío Mateo y la Toñi.(Otoño, noviembre de 2008)

En una semana se nos han ido el tío Gregorio, Mateo el “Máquinas” y la Toñi, la mujer del Eugenio, madre de los "Pizorros". Todos han muerto en el hospital y velados en el nuevo y lujoso tanatorio de Soria capital, que ha construido una multinacional de pompas fúnebres. Ya casi nadie muere en casa como hace años, rodeado de los suyos. La muerte hoy es un tabú, su rostro desagradable hay que ocultarlo de alguna manera, sobre todo ocultarlo a los niños.

“Y todos en el mismo barrio”, me comenta Carlos el “Ronamini “.Y es que en este mundo todos vivimos en el mismo barrio, en la aldea global.  Aunque con quien peor nos llevamos a veces es con el vecino. A pesar de todo: “Todo el mundo es bueno”, como rezaba el título de una película de humor y de bromas. Todo el mundo es bueno hasta el vecino.

Muertes siempre sentidas porque son de personas que han sido vecinos de toda la vida, capítulos vivientes de la historia de este pueblo y de la zona. Testigos de la vida y de la muerte, de la despoblación de esta tierra. Gente trabajadora y generosa con todos. De casas abiertas a todos. Conservadores, en el buen sentido de la palabra, de una cultura que también  se muere, que agoniza, la cultura o civilización rural.  Yo siempre he entendido que la cultura verdadera es un estilo de vida, una manera de vivir y de contemplar el mundo y la vida.

Como dice el premio Nóbel turco Orhan Pamuk (2006) “Uno empieza a morir cuando muere su padre o su madre”. Sara la nieta del "Máquinas", de cinco años de edad, y vecina de la Toñi pregunta: ¿por qué se ha muerto la Toñi si no era vieja?  A esa corta edad la muerte no es más que un nombre, una idea vaga entre arrugas y cabellos blancos. Piensa que empezamos a morir cuando nos hacemos  viejos. Querida Sara:  “cuando nacemos, ahí empezamos a morir...”. Querida Sara: guarda en tu memoria el recuerdo de lo mejor de tu abuelito Mateo y de tu vecina la Toñi. Su bondad y ternura para contigo, su generosidad, su sabiduría popular. Lo necesitarás para madurar como persona, para sobrevivir en este mundo frío e inhóspito. La bondad nunca muere. 

Algunos se empeñan en morir, otros se empeñan en vivir. “La esperanza es una cosa buena, quizás de las mejores. Y las cosas buenas nunca mueren”. (de la película “Cadena perpetua”) Todo lo que se ama permanece. Lo dijo bien Ezra Pound (1885-1972) “Lo que quieres de verdad perdura, /el resto es escoria. /Lo que quieres de verdad no te será robado, /lo que quieres de verdad es tu verdadera herencia”. San Pablo nos recuerda: “que el amor no pasa nunca”.

Jesús Mendoza Dueñas

Jesús Mendoza Dueñas